Naming de empresa, todo lo que debes saber.
Naming de empresa, todo lo que debes saber.
Nombrar una empresa puede parecer una tarea sencilla, pero es más complicada de lo que parece. La elección del nombre de la empresa implica la cesión real y potencial de atributos importantes que permiten posicionar correctamente la marca en la mente de los consumidores. El proceso de elegir el nombre adecuado se llama "naming" y es un proceso vital porque una marca sin nombre no existe para el público ni para el mercado.
Qué es el naming de una empresa
En este artículo, vamos a darte algunos consejos útiles para ayudarte a nombrar tu empresa con éxito. La creatividad es importante, pero siempre debe sustentarse en una profunda labor de análisis y recopilación de contenido. La identificación, las connotaciones positivas, el impacto, la notoriedad y la influencia adecuada en la construcción de la marca dependen de algunos factores importantes que conviene tener en cuenta.
Conoce a fondo la empresa
Antes que nada, es fundamental conocer a fondo la empresa. ¿A qué se dedica? ¿Qué valores representa? ¿A qué público se dirige y qué ventaja diferencial ofrece respecto a la competencia? Es importante encuadrar el naming de la empresa dentro del diseño de marca para mantener la armonía entre ambas cosas.
Análisis de la competencia
Otro factor importante es el análisis de la competencia. Las marcas conviven con las de la competencia, y es con ellas con las que deben pelear para atrapar a los mismos potenciales consumidores. Diferenciarse, superarlas, aportar nuevos matices deseables y explotar los nichos de mercado existentes son las claves para conseguirlo.
Algunos tipos de naming
- Descriptivo: La estrategia de naming descriptivo se enfoca en reflejar lo que el objeto nominado es o hace. Un ejemplo de esto es la marca de azúcar Azucarera y las tiendas Comercial Algodonera. Esta estrategia es la más antigua de todas y tiene la ventaja de posicionar claramente las marcas, lo que favorece el reconocimiento y el recuerdo. Sin embargo, los nombres descriptivos no son diferenciales ni emocionantes, y pueden quedarse obsoletos más pronto que tarde.
- Acrónimo: La estrategia de naming acrónimo se enfoca en formar siglas a partir de las iniciales de los nombres funcionales. Por ejemplo, GEICO en lugar de Government Employees Insurance Company, o UGT en lugar de Unión General de Trabajadores. Los nombres acrónimos suelen ser cortos, rápidos y sonoros, pero también pueden resultar un tanto fríos, sin demasiada chispa ni alma. Son meras agrupaciones de letras que deben ser dotadas de atributos, emociones y valores.
- Abstracto o de fantasía: La estrategia de naming abstracto o de fantasía se enfoca en inventar palabras que carecen de manchas o influencias del pasado. Un buen ejemplo de esto es Limpiology o El Atrapamundos. Los nombres abstractos tienen la ventaja de ser diferenciados y neutrales al principio, lo que permite la creatividad para dotarlos de atributos, emociones y valores específicos.
- Evocativo: La estrategia de naming evocativo se enfoca en partir de una raíz conocida para crear algo nuevo. Un ejemplo es Vueling, Sania o Empresarium. Estos nombres tienen la ventaja de no partir de cero al posicionar el producto, servicio o compañía.
Existen muchos tipos de nombres comerciales, cada uno es único. Sin embargo, se han creado algunas categorías habituales que permiten centrar el trabajo de búsqueda, categorización, análisis y creatividad de una manera más práctica. Es importante elegir un nombre que sea fácil de recordar y pronunciar, único, distintivo y coherente con la imagen corporativa y los valores de la empresa.
Además, el nombre de la empresa debe ser único y distintivo. Esto significa que no debe ser similar a ningún otro nombre registrado, de lo contrario podría haber problemas legales y de propiedad intelectual. La saturación registral es una consecuencia directa de la popularidad de los nombres. A medida que las empresas se multiplican y las marcas se vuelven más conocidas, la demanda por nombres únicos y distintivos aumenta, lo que a su vez hace que los registros de marcas y patentes se saturen rápidamente.
Una vez elegido el nombre de la empresa, es muy recomendable registrar y proteger el naming en el organismo correspondiente de propiedad industrial de cada país. Este registro es fundamental para proteger el nombre de posibles imitaciones o plagios.
En resumen, encontrar el nombre perfecto para una empresa es una tarea desafiante que requiere una combinación de creatividad, investigación y conocimiento de las normativas y regulaciones legales y de propiedad intelectual.